El Efecto Miyagi

"Maestro dice, estudiante hace"

Sr. Miyagi

        Ya son parte de la cultura popular los famosos principios de “Encerar y Pulir” que aprendió Daniel San a través de un método parecido al de aprender haciendo, se hizo diestro encerando, puliendo, pintando hacia arriba, hacia abajo y mientras el pequeño saltamontes sacaba provecho de las enseñanzas de su maestro, este último también le sacó bastante provecho a los entrenamientos de su estudiante, hoy le dirían a eso una relación Ganar-Ganar; hasta aquí todo parece perfecto… pero… ¿Realmente es tan efectivo este método de enseñanza en la vida real para lograr la maestría de un arte u oficio? ¿Puede aplicarse en la educación de cualquier actividad práctica con resultados positivos en el estudiante?, veamos a que pretendo referirme como el Efecto Miyagi.

      La frustración fue el sentimiento predominante durante la formación de Daniel en su proceso de aprendizaje, no comprendía las razones por las que debía realizar una tarea, no lograba asociar su esfuerzo con un aprendizaje significativo que lo impulsara a su meta de aprender defensa personal, esto se debe a que nunca recibió una explicación sobre las razones para realizar las tareas asignadas o sobre los objetivos que se perseguían con éstas, nadie estaba para corregir cuando algún movimiento no estaba bien hecho.

         Es así como en educación, una mayoría de los estudiantes muestra una actitud negativa ante un método de enseñanza completamente arbitrario, se muestran inconformes cuando no reciben suficientes argumentos que justifiquen su esfuerzo antes de comenzar a hacerlo, y se muestran poco motivados ante situaciones que no logran dominar sin el acompañamiento adecuado, estamos ante la generación del ¿por qué? Y del ¿para qué?, y va más allá, también es común ahora que cada quién desee aportar ideas, participar en la enseñanza; en respuesta, los docentes, entrenadores, maestros, padres y madres, debemos imaginar estrategias que logren captar la atención y motivar, explicar todo cuanto sea necesario, hacer uso extensivo de la palabra antes, durante y después del proceso de aprendizaje, dividir los procesos complejos en varias partes más simples, y darle significado a cada paso, estar allí durante todo el proceso y sobre todo, escuchar atentamente. Obviamente estoy generalizando, precisamente porque para los docentes es materia prima el conocimiento general que pueden tener sobre sus estudiantes, esto es ayuda fundamental para descubrir estrategias adecuadas que incrementen la motivación para finalmente lograr un aprendizaje significativo en la mayoría, y aún más para identificar algún caso particular fuera de lo común.

         En una segunda fase de la película, le fueron enseñados al protagonista otros principios del Karate Do ya de manera explícita sin que nunca tuviese la oportunidad de ponerlos en práctica, finalmente por la magia del cine, Daniel San fue el Campeón, triunfando ante varios Goliats que habían pasado sus vidas buscando peleas. He aquí otro mito ampliamente aceptado como una verdad: Lograr un alto nivel de destreza en algo que nunca se ha ensayado.

        La destreza sólo puede desarrollarse con la práctica, aun cuando un talento particular le dé un buen impulso a un estudiante, es por esto que si usted encera y pule un automóvil, está mejorando su destreza para: Encerar y Pulir Autos. Si desea aprender a pelear, debe entrenar peleando, probablemente aprenda los fundamentos por separado (golpes básicos, patadas o técnicas) pero para aprender cómo usarlos y para saber cuáles se adaptan mejor a usted, indudablemente debe ponerlos en práctica. Aplique este principio a cualquier otro deporte o actividad práctica: ¿Cómo puede mejorar su técnica de patear un balón, o de correr rápidamente, o de pegar bloques y armar una pared? La respuesta es poniendo en práctica las técnicas una y otra vez. 

       Es necesario aclarar en este punto que seguramente encerar y pulir sí logre fortalecer sus miembros superiores, y que esto lógicamente tenga un impacto positivo a la hora de defender o bloquear, pero preparación física no es lo mismo que técnica o táctica, todas son necesarias pero estas últimas son fundamentales.

        Otra aclaratoria importante y final, es que la película a la que hago referencia proyecta las costumbres de la cultura Japonesa, es un hecho que muchos japoneses en décadas pasadas aprendieron y perfeccionaron oficios con métodos de enseñanza como los de Miyagi, también es cierto que Japón tiene un pueblo próspero y muy disciplinado, y es aún más cierto, que ellos en este siglo XXI han avanzado en su educación proporcionalmente a su desarrollo social. Con esto quiero decir que para lograr un modelo educativo que logre sus objetivos, lo primero que se debe considerar es al grupo, debe el modelo adaptarse a las realidades más locales, a la cultura más esencial, para transformar a partir de ese punto.